martes, 9 de octubre de 2007

Juegos peligrosos


Quién no ha querido jugar con cositas en una sesión de sexo?? utilizar hielo, miel, chocolate, leche condensada, fruta, o incluso algún juguetito?? Muy bien, muy bien..., hay que innovar para no caer en la monotonía, pero con cuidado por favor!!!

Os contaré lo que le ocurrió a una de mis mejores amigas por intentar hacer algo fuera de lo habitual.

Por aquel entonces estaba medio enamorada de un camarero con mote explosivo. Él se liaba con ella para lo de siempre y ella a cada vez que él pasaba, se enganchaba más. Con lo cual, hubo idas y venidas, cenas, desplantes, juegos de cama, etc...
En una de esas noches de juegos sexuales, mi amiga
Romy, que se sentía inspirada, intento hacer algo nuevo. En primer lugar y con el consentimiento de él, por supuesto, le ató a la cama, cual exclavo en la cruz, prometiendo hacerle ver las estrellas de gozo. La cuerda en ese momento no pudo ser otra que el cinturón húmedo del albornoz que pululaba por la habitación. Una vez inmovilizada la presa, se dispuso a buscar algo que endulzara el bocado. Así que acordándose de la mousse de chocolate que días atrás había hecho, se fue a buscarla. La mousse se encontraba en el frigorífico y claro, estaba bastante dura así que ni corta ni perezosa la metió unos segunditos al microondas para que aquello se derritiera un poco y así poder jugar mejor con ella. Cuando éste terminó, la probó y vio que no estaba demasiado caliente. Entró en la habitación con ella en la mano y cara de viciosilla, mientras él entre incrédulo, morboso y excitado no estaba seguro de lo que iba a ocurrir. Los ojos brillantes de ambos, se miraban, se sonreían... Ella se arrodilló al pié de la cama y se dispuso a poner la mousse en el asta de aquél barco. En cuanto el chocolate se posó en el capullo, aquel que estaba acostado y atado sí.... empezó a ver las estrellas, pero de dolor!!!!!! La mousse estaba buena para el paladar, pero para zonas delicadas quizás aún quemaba un poquito! El explosivo empezó a chillar "estas loca!!!, me quieres matar!!!", mientras se debatía por desatarse, cosa que no lograba. Con el pito ardiendo, sin poder tocárselo y encima mi amiga, que le entró la risa, no podía desatarlo ya que al estar el cinturón húmero era imposible deshacer el nudo... con lo cual él se enfadaba aún más. Me lo imagino retorciendose en la cama, subiendo y bajando la pelvis pero de dolor, jajaja!!!! La habitación se llenó de mousse por todos los sitios, paredes, cama, suelo, cuerpo del explosivo...
Al final escapó al ser cortadas sus ataduras y salió corriendo pasillo adelante, en pelota picada, con el pito quemado, chocolateado y gritando barbaridades!!
No me quiero imaginar si en aquel momento sale del cuarto una de las compañeras de piso de
Romy medio puritana y se encuentra al otro de aquella guisa!! Menudo cuadro!

En fin, como veis éste es un claro ejemplo de que hay que tener mucho cuidado con los jueguecitos, con los chocolates y con los "capullos". Esto es como con los bebes, probar antes en el reverso de la muñeca no vayáis a desgraciar el miembro más preciado de los hombres!!! donde se agarrarían después si lo hacéis???